DIARIO DE UNA ADOLESCENTE
                                                         
                                                            II

Quisiera ahora que estuvieras aquí, pacificando mi alma, llevándome hacia ti.

No sé que espero ¿sabes? A veces sin querer me hundo sola con mis problemas

y siento que no soy yo misma sino otra, que teme a la vida, que se sabe inválida.

No tengo siquiera voluntad de ser.

Y es en estos momentos que quisiera que estuvieras aquí, apaciguando mi angustia

quebrando mis fuerzas de destruir.

Tal vez que me llevaras lejos, a un lugar despejado, aire, sol, olor a mar.

Hacer contigo todo un paisaje, sereno, cálido, feliz.

No me dejes sola, te necesito. Quizás mañana, así, te ame.